Sigüenza, el pueblo más bonito a una hora de Madrid
Sigüenza destaca por su trazado medieval y por la belleza de sus construcciones. Foto: iStock.

Este es uno de los pueblos más bonitos de España: está a una hora de Madrid y es la escapada perfecta

En la provincia de Guadalajara se encuentra Sigüenza, que se ha convertido en la escapada perfecta por su cercanía con Madrid y su monumental belleza.

Lucía Lorenzo | 6 Mar 2025

Historia, cultura y buena gastronomía serían los términos perfectos para describir Castilla-La Mancha. Esta comunidad autónoma, situada muy cerca de Madrid, oculta destinos como San Carlos del Valle, conocido como el pequeño Vaticano, o como Sigüenza, en Guadalajara, que ha conseguido colarse entre los pueblos más bonitos de España.

Al menos, así lo ha considerado la prestigiosa revista de viajes National Geographic, que ha resaltado el encanto medieval de esta localidad de apenas 4.000 habitantes. A nosotros, además, nos ha conquistado su riqueza patrimonial, sus estrechas calles de piedra y su cercanía con la capital, lo que la convierte en el destino perfecto para una escapada de fin de semana.

Así es uno de los pueblos más bonitos de España

Ya desde la lejanía, Sigüenza se perfila como un pueblo de piedra, su silueta beige haciéndose más y más grande a medida que nos acercamos. Las calles estrechas y empedradas podrían ser las de casi cualquier municipio castellano, si no fuera porque aquí todo tiene un aire de grandeza histórica, casi legendaria.

Desde las casas particulares hasta la enorme catedral, todo parece cubierto por un halo medieval. No hay un solo edificio que rompa esta armonía, ese fino equilibrio en el que reside el secreto de su belleza. Las casas son bajas, las plazas están rodeadas de soportales y las calles serpentean, recubiertas de hiedra y flores.

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La catedral de Santa María, en Sigüenza. Foto: Pixabay.

Durante la Edad Media, su ubicación privilegiada en la parte más alta del valle de Sigüenza hizo que tuviera un importantísimo papel defensivo, especialmente en las luchas entre cristianos y musulmanes. Su época de máximo esplendor coincidió con el mandato del cardenal Mendoza, que mandó construir la plaza porticada que descansa a los pies de la catedral.

No obstante, ya en el siglo I a.C. estaba habitada por los arévacos. Más tarde llegarían los celtíberos, los romanos y los visigodos. Quizás sea por esto que, al caminar por sus calles, aún resuenen los ecos de este pasado majestuoso. Cuando uno visita este municipio no se limita a conocer otros lugares, sino que se tiene la sensación de viajar también en el tiempo, hasta épocas ya muy lejanas que de algún modo han sobrevivido aquí.

Qué ver en Sigüenza

El edificio más monumental de Sigüenza es, sin duda, la catedral de Santa María: un templo cuyo origen se remonta al siglo XII, de estilo románico en sus inicios, que fue vistiéndose de estilo gótico posteriormente. Más allá de sus altas torres, merece la pena pasar al interior y dejarse enamorar por las enormes bóvedas de crucería, los ricos retablos y las colecciones de tapices flamencos.

También merece la pena visitar el castillo, construido también en el siglo XII sobre una fortaleza musulmana. Ha soportado batallas, remodelaciones y ha resistido los embistes del tiempo. Entre sus muros pasearon personajes tan ilustres como Fernando VII, Carlos de Austria, el cardenal Mendoza o el cardenal Cisneros. También doña Blanca de Borbón, que fue encarcelada en las mazmorras por Pedro el Cruel y cuyo fantasma se dice que sigue vagando por el interior de las habitaciones.

La fortaleza, hoy convertida en el Parador de Sigüenza, vigila la localidad con su imponente estructura. Aunque los huéspedes tienen más fácil visitarlo, es posible entrar y darse una vuelta por el patio de armas, donde entre los gruesos muros y los cuidados setos se encuentra la terraza de la cafetería. Si quieres sentirte como un rey mientras desayunas, no se nos ocurre mejor opción.

Otro lugar ideal para tomar un café y disfrutar de los perezosos rayos de sol de los últimos días del invierno es la Plaza Mayor. Los soportales, la figura de la catedral y la del Ayuntamiento forman parte de su indudable encanto medieval, que también está presente en la Calle Mayor, en la pequeña Plazuela de la Cárcel y en la fachada de la Ermita de Santa María de los Huertos.

Da igual donde vayas o donde mires. Es posible ver un atisbo de belleza en cada calle, cada edificio y cada rincón de Sigüenza. Encantador, histórico y grandioso, este municipio se ha ganado con honores su puesto entre los pueblos más bonitos de España.

TURIUM TIPS

Para dormir, reserva una noche en el Parador de Sigüenza: un hotel de cuatro estrellas situado en el interior de una fortaleza medieval que fue hogar de reyes, obispos y cardenales.
En Sigüenza hay dos restaurantes Estrella Michelin. Se trata de El Doncel, que mezcla un ambiente rústico con la mejor cocina moderna, y donde puedes disfrutar de un menú degustación exquisito por tan solo 86 €; y El Molino de Alcuneza, que cuenta además con una Estrella Verde Michelin por su compromiso con la sostenibilidad.