La mejor capital europea para visitar en otoño: palacios de cuento, cafés, mercadillos y atardeceres sobre el Danubio
Viena está considerada uno de los mejores destinos europeos para el otoño. Foto: iStock.

La mejor capital europea para visitar en otoño: palacios de cuento, cafés, mercadillos y atardeceres sobre el Danubio

El otoño en Viena no es más que una estación, es un estado de ánimo. La ciudad se viste de gala y cada esquina ofrece una sorpresa, cada café un respiro, y cada puesta de sol sobre el Danubio, una postal para el recuerdo.

Aleks Gallardo | Octubre 26, 2024

Las ciudades tienen su propio tempo. Algunas son caóticas como Londres y sus lugares llenos de encanto, otras son serenas y pueden verse en pocos días, como Copenhague en una visita rápida. Y luego está Viena. Es una melodía cuidadosamente orquestada donde el otoño actúa como el director de la temporada, trayendo un ritmo propio a la capital austríaca. Mientras otros destinos se preparan para la caída de temperaturas, Viena se envuelve en una capa de historia, arte y cultura. Si ya sientes la brisa fresca del Danubio desde aquí, estás en el lugar correcto, porque es sin duda alguna la mejor capital europea para visitar en otoño.

El poeta austríaco Rainer Maria Rilke una vez dijo que "el otoño es la segunda primavera, cuando cada hoja es una flor". Viena personifica esta idea a la perfección. Los parques se transforman en galerías de arte natural, los cafés despliegan mantas cálidas en sus terrazas y la ciudad entera parece estar diseñada para disfrutar con calma. Sí, París tiene sus luces y Roma sus ruinas, pero la capital de Austriatiene una atmósfera otoñal que va más allá de la postal. Esta ciudad invita a sumergirse en la experiencia sin prisas, saboreando cada rincón como si fuese una pieza de música clásica.

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Los jardines del Palacio de Schönbrunn en pleno otoño. Foto: Pixabay

Historia y arquitectura: el escenario ideal

El Palacio de Schönbrunn, con sus jardines que parecen brotar de un cuadro barroco, es un espectáculo impresionante bajo los tonos dorados y rojos del otoño. Si lo visitas, podrás perderte en los laberintos de setos o simplemente pasear por las amplias avenidas, sintiendo cómo el aire fresco te despierta.

Pero la verdadera joya de Viena es su casco antiguo. Cada edificio cuenta una historia: desde la majestuosa Catedral de San Esteban hasta los elegantes palacios de la Ringstrasse. En esta época del año, la luz suave del sol ilumina los detalles arquitectónicos de una manera que solo puede describirse como mágica. La ciudad se siente más accesible, más abierta, como si estuviera dispuesta a compartir sus secretos más íntimos con aquellos que sepan escuchar.

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Las calles de Viena en otoño. Foto: Unsplash

El arte de disfrutar el café y la cultura

Viena no sería Viena sin sus célebres cafés, verdaderos templos del buen vivir. Durante el otoño, el ritual del café adquiere una dimensión especial. Al entrar en lugares emblemáticos como el Café Central o el Café Sacher, el aroma de los pasteles recién horneados y del café recién molido te recibe con los brazos abiertos. Mientras observas a los locales leer el periódico o charlar suavemente entre sorbos, no te olvides de probar su tarta Sacher

Además, el otoño en Viena significa el inicio de una temporada cultural incomparable. Las puertas de la Ópera Estatal de Viena se abren con producciones que atraen a lo mejor de lo mejor del mundo del arte. No es necesario ser un experto para disfrutar de una noche en la ópera: simplemente hay que dejarse llevar por la majestuosidad del edificio, la pasión de las actuaciones y la elegancia del ambiente. Si al salir de la ópera no has comprendido aún por qué es la mejor capital europea para visitar en otoño, ve al Museo de Historia del Arte y el Albertina, que en esta época suele albergar exposiciones temporales de calibre mundial, ofreciendo un refugio perfecto si las temperaturas bajan un poco. 

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Ópera de Viena. Foto: Pixabay

Qué ver en Viena si quieres aprovechar tu viaje al máximo

Aunque Viena es famosa por su vida cultural y su historia, también es una ciudad increíblemente verde. El otoño es el momento ideal para explorar sus parques y jardines, como el Prater, hogar de la icónica noria gigante. Bajo la sombra de los castaños, puedes dar un paseo en bicicleta o simplemente disfrutar de un tranquilo paseo mientras las hojas crujen bajo tus pies.

Para los más aventureros, las colinas del Wienerwald, a las afueras de la ciudad, ofrecen rutas de senderismo con vistas panorámicas de Viena y el Danubio. Y si el senderismo te ha abierto el apetito, puedes terminar la jornada en una de las tradicionales heurigen, tabernas locales donde se sirve vino joven y comida típica en un entorno rústico y acogedor.

TURIUM TIPS 

Hotel Sacher: alójate en este icónico hotel de cinco estrellas y prueba su famosa Sachertorte en el café del hotel.
Alta cocina austríaca en Steirereck: uno de los mejores restaurantes de Viena, galardonado con dos estrellas Michelin.
Concierto en la Ópera Estatal de Viena: reserva entradas para una actuación en este emblemático teatro de ópera, uno de los más prestigiosos del mundo.
Paseo en carruaje por el casco antiguo: disfruta de un recorrido privado en un fiaker, los tradicionales carruajes vieneses. Te sentirás como un miembros de la antigua nobleza mientras descubres los monumentos históricos de la ciudad.